si ya has probado a suavizar los sabores con purés rebajados con leche , inténtalo también mezclando salsa de tomate casera con aquellas verduras que más le cueste comer.Eso sí,siempre cocidas y trituradas,y mejor con bases apetecibles como pasta o arroz.
Legumbres:
hazlas puré y pasadas por el chino.Estarán más suaves si las mezclas con caldo de verduras,y parecerán divertidas si se convierten en minicroquetas para acompañar hamburguesas o filetes rusos.
Fruta:
el eterno problema puede desaparecer si los zumos se convierten en polos y la pulpa en la sorpresa multicolor de los helados.Hacer macedonias frescas con salsas de chocolate o sirope de fresa puede obrar milagros.Espolvorear fideos de chocolate sobre trozos de fruta es un dulce recurso que los pequeños adoran.
No hay comentarios:
Publicar un comentario